1) Objetivos:
- Denunciar que no hay democracia. Exigirla.
- Exigir un Sistema político donde se
garanticen los derechos fundamentales de las personas.
- Negar la legitimidad de gobiernos y partidos
para hacer todo lo que están haciendo.
- Legitimar y respaldar las luchas de la
ciudadanía los restantes 364 días del año.
- Visibilizar más eficazmente el rechazo de
los ciudadanos al Sistema político vigente.
Puesto que no hay democracia, en coherencia
con ello, los escaños conseguidos se dejarían vacíos.
2) Forma:
Si es posible, agrupaciones de electores.
Si no es posible, y mejor temporalmente, con uno o varios
partidos-herramienta.
3) Programa electoral.
En la página anterior.
4) Integrantes de las candidaturas:
Los
candidatos sólo tendrían una responsabilidad principal: no tomar posesión de
los cargos si resultasen elegidos. Eso lo puede hacer cualquiera. Por tanto:
Los
candidatos serán seleccionados por sorteo de entre todos los voluntarios que se
presenten.
El orden de
los candidatos también se sortearía.
No habría
votaciones que pudieran dar lugar a manipulaciones: el sorteo iguala a todos.
Otras medidas de seguridad para reducir
el riesgo de corrupción y/o oportunismo:
1. Para dificultar la presencia de oportunistas
en las primeras posiciones, cada voluntario que se haya ofrecido a encabezar
una candidatura tendría que aportar un número determinado de avales de los que hay que
recoger para presentar las candidaturas (10, 20, 25… pocos, puesto que
debe haber muchos voluntarios que asuman esa responsabilidad, cuantos más,
mejor).
2. Los cabezas de lista (tres primeras
posiciones) no serán portavoces, ni irán a los medios de
comunicación, ni tendrán el menor protagonismo, más allá de dejar el escaño
vacío si salieran elegidos (que ya es bastante).
3. No podrían ser candidatos:
- Los responsables
de la agrupación de electores.
- Los
afiliados y cargos del partido, si finalmente se utilizara este en lugar de una
agrupación de electores.
Nota: puesto que ningún afiliado al partido-herramienta
podría ser candidato, todos los candidatos figurarían en la lista electoral como “independientes”.
4. No podrían optar a ir en las tres
primeras posiciones de una candidatura:
- Aquellos
que ya hayan participado en otra candidatura electoral (da igual dónde,
cuándo y de quién) en las tres primeras posiciones.
- Ninguna persona que haya participado en otra candidatura electoral, en la posición que sea (da igual dónde y cuándo) de partidos políticos que hayan ocupado u estén ocupando actualmente una silla de diputado, senador o concejal.
5) Garantías de no tomar posesión de los cargos:
No se puede garantizar al 100%, por el veto al mandato imperativo del artículo 67.2 de la Constitución.
Las medidas anticorrupción propuestas en el apartado 4) mejorarían las posibilidades de sacar adelante una candidatura limpia.
Además, todos los candidatos tendrían que aportar el compromiso que se adjunta en la sección “Compromiso”. Se pediría el mismo por escrito y firmado a los tres primeros de cada lista.
Esos tres primeros candidatos tendrían que grabar su compromiso también en un vídeo, que se haría público.
Y finalmente, se pueden plantear medidas más creativas como un compromiso escrito y firmado donde esos tres candidatos se comprometan a indemnizar a la ciudadanía (concretada ¿en alguna ONG?) con, por ejemplo, un millón de euros por daños morales, si lo incumplen.
No sabemos si esto será realmente exigible por vía judicial, pero puede actuar como desincentivador de oportunistas.
6) Nombre de la agrupación de electores
o del partido-herramienta:
Importa poco. A elegir. Unas propuestas:
“Agrupación de electores por la Democracia”
“¡DEMOCRACIA!”
“NO AL SISTEMA”
¿Más propuestas?